RETO Día 23: Sr. Brody…

Ésta caricatura rápida está inspirada en una foto que encontré en el perfil de Instagram de Adrien Brody, el actor.

Sí, lo sé, parece que me ha dado por las narices grandes (Saragrafías, a ver qué me dices de las narices grandes jajaja es broma). De echo busqué especialmente a éste actor por su nariz.

La cuestión es que me hizo mucha gracia la expresión que tenían los dos hombres en la foto y quise acentuarla, hasta hacer que los dos pareciesen sacados de un cómic. ¿Sabíais que ahora el susodicho también es artista plástico? Su perfil de Instagram es muy creativo, toda una sorpresa.

Ahora bien, si no os hubiese dicho de dónde sale el dibujo… ¿qué diríais de ellos? A mi me da la sensación que se lo están pasando en grande.

Mis pies. Tus pies.

Me encantan las cuentas con fotos invernales que enfocan pies, tazas de café, libros y cosas comfortables como mantas peludas y calcetines gruesos.

Hoy estoy trabajando pero me gustaría estar como esos pies, en algun lugar escandinavo, con una taza de café caliente y unas zapatillas mulliditas y calentitas.

Saqué la inspiración de la cuenta de Instagram Ofsimplicity que me encanta. De echo, me encantan las cuentas con fotos invernales que enfocan pies, tazas de café, libros y cosas comfortables como mantas peludas y calcetines gruesos.

Así también estrené los lápices de colores acuarelables que me regaló mi hermana por Navidad. ¡Gracias Tata!

Ahora imaginaros que sois esos pies… ¿dónde estaríais?

Son esas mentiras.

No soporto las mentiras. Esas mentiras que afectan a otras personas. Esas mentiras que anteponen el poder, la fama y el prestigio de otros, a la seguridad del resto de los mortales. Las que anteponen el dinero y las cámaras de televisión. Las que pueden hacer mucho daño. 

Me hierve la sangre.

Mucho.

En éstos momentos, ese demonio que habita en nosotros y suele estar bastante controlado, está ansioso por salir. Ruge de rabia.

No soporto las mentiras. Esas mentiras que afectan a otras personas. Esas mentiras que anteponen el poder, la fama y el prestigio de otros, a la seguridad del resto de los mortales. Las que anteponen el dinero y las cámaras de televisión. Las que pueden hacer mucho daño.

Y lo hacen.

Esas mentiras que no se pueden contar.

Esas que dentro de ellas mismas conllevan otras mentiras.

Esas que se adornan para que queden bonitas porque eso es lo que realmente importa, que a los ojos de los que creen, quede bonito.

Nos dominan con palabras vanas y retorcidas mientras por detrás, tejen sus propias telarañas. Esa falsedad, maquiavélica y manipuladora de personas con poder que luego alardean que hacen el bien, que se preocupan por todos.

Y todo es mentira.

Me hierve la sangre.